El próximo 1 de noviembre cumplirá los 97 años. Creo que ya no anda entre bambalinas, pero estuvo hasta los 87 al menos dale que te pego al saxo alto y hasta cantando blues que hablan de “un marido que se está quedando pobre porque su mujer no hace más que darle al whiskey”, argumento de la última propuesta que os formulo.

Inspirado por Charlie Parker, de quien se afirma que es su heredero, este señor de Carolina del Norte (1.926), empezó a grabar discos para el sello Blue Note, fundamentalmente, en los años cincuenta, y ha tocado con figuras como Clifford Brown, Mc Coy Tyner, Milt Jackson, Horace Silver y Miles Davis, entre otros. Encarna lo que ha dado en llamar el soul jazz, e incluso el funk, pero su toque está impregnado de blues. El dominio de su instrumento es apabullante y aún lo era en sus últimos conciertos.

Prolífico en cuanto a producción discográfica se refiere, sus colaboraciones con los Jazz Messengers o con el propio Monk marcaron  hitos en la historia del jazz.

Algunos le llamaron “el abuelo del jazz”, por ser de los mas longevos, sino el que más que aun subía a los escenarios. Estaba prevista una actuación en el Festival de Jazz de Málaga de 2.014, pero se suspendió el concierto porque se puso malito. Nos lo perdimos y ya…como que no. Nos perdimos su música,  pero también su elegancia y sentido del humor.

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