Paul Motian, o la batería incansable.

Desde que se iniciara como músico profesional en 1.954, hasta su muerte, un día de lotería de navidad con mala suerte, en 2.011, Paul Motian ha estado en mil y una batallas de la historia del jazz, o sea que el baterista sí que “se ha curtido en más de mil batallas”. Natural de Rhode Island, (1931), nacido en el seno de una familia sin músicos, pero melómana, descubrió el jazz a los 15 años de la escucha de Duke Ellington, Count Basie, el bop y claro, Charlie Parker. Cuando terminó la mili, ya dominando el instrumento, acompaña a diversas orquestas, siendo en la de Jerry Wall donde conoce y traba amistad con el pianista Bill Evans, con el que formaría, en compañía del contrabajista Scott La Faro,en 1.959 y durante cinco años, un trío que ha sido mito y leyenda en la historia de esta música. Antes de esta aventura había tocado con George Russell. Oscar Pettiford, Lennie Tristano y Wayne Marsh, Al Cohn, y acompañado de cuando en vez a Coleman Hawkins, Thelonious Monk, y Billie Holiday. Tras la disolución del trío de Evans,  toca con Coltrane,  con Martia Solal, y forma trío con el pianista Paul Bley.  En 1.964, se reúne con Gary Peacock y se asocia con Albert Ayler, Pharoah Sanders y Don Cherry, puro free. En 1972, nuevo trío con Keith Jarrett y Charlie Haden, otro trío para la historia, que se convierte en cuarteto con la entrada del saxofonista Dewey Redman. Otros cinco años de jazz de lujo. A todo esto, desde 1.972 ya hacía su debut como líder, si bien no es hasta la disolución de la formación de Jarrett cuando su andadura es más notable. Su formación más estable y exquisita es la que incluye a Joe Lovano, Bill Frissell, y a veces a Lee Konitz, siempre sin piano. También ha sido miembro destacado de la Liberation Music Orchestra de Haden.

Además de darle a los platillos con una sutileza y delicadeza admirables, con un sentido profundo de la melodía y convirtiendo a la batería en un instrumento solista más, nada de simplemente acompañar, Paul Motian era un excelente compositor.  Tuve ocasión de verlo con Lovano y Bill Frissell, pero me perdonaran si no recuerde exactamente donde, tal vez en Graná, o Sevilla.