Me imagino que a muchos os habrán preguntado si erais de los Beatles o de los Stones. Cuando a mi me han hecho esa pregunta me acordaba de cuando, siendo niños, nos preguntaban aquello de : “A quien quieres mas a Papá o a Mama” ?, y no sabias muy bien que contestar y aparecía entonces la vena diplomática, que todos llevamos dentro ,y decíamos aquello de : “ A los dos iguales” y de ahí no nos movíamos. Bueno, pues yo era mas de Beatles de joven y de los Stones, a los que he visto dos veces como ya he dicho por aquí, cuando me iba haciendo menos joven. O sea, que soy de las dos bandas.
El caso es que como soy reticente a traer el blog a los “obvios o evidentes”, como les llamo, he sido reacio a colgar a los de Liverpool. aunque sus “Satánicas Majestades” si salieron por aquí, con motivo de su último concierto en Madrid, pero el otro día en que me regalé una sesión beatlleniana, escuchándolos y deleitándome con ellos, me dije, un día de estos me dará por sacarlos a la palestra y ¡hete aquí¡ que hoy ha tocado.
Os propongo la escucha de cuatro temas, de los que más me gustan, entre ellos, “Don´t let me down” que forma parte del llamado “concierto en la azotea”, que tuvo lugar el 30 de enero de 1.969 y que fue, a la postre, su último concierto en vivo. La azotea era del edificio de la Appel Corps, el estudio de grabación de la banda. No hubo público, salvo el de la calle que miraba hacia arriba al oír la música, los trabajadores de las oficinas de la Appel y algunos policías que llegaron a suspenderlo tras las protestas de los vecindarios. En una azotea contigua a la mía se ponen a tocar los Beatles e iba yo a llamar a la poli…… ¡Serían necios¡ Contaron con el acompañamiento de Billie Preston en algunos temas. También os propongo “I am the walrus”, con video psicodélico incluido. Era la cara B del single que tenía por cara A, “Hello Goodbye”. Después paso a forma parte del LP “Magical Mystery Tour”. Por lo visto, Lennon autor de la letra, fue cogiendo frases de aquí, allá y acullá, para conformar una canción con una letra, sin sentido alguno. Parece ser que fue la respuesta a aquellos que preguntaban sobre el sentido de las letras de otras canciones suyas buscando, como decimos por aquí, los tres pies al gato, y encontrando explicaciones de las mismas que Lennon consideró ridículas e irrisorias. “Lo de la “morsa” es como un sueño; las letras no significan casi nada. La gente extrae un montón de conclusiones y es de lo más absurdo”, escribió el beatle.