Creo que puedo afirmar, sin temor a equivocarme, que la película de Bertrand Tavernier “Alrededor de la Medianoche” de 1.986 es la que mejor ha tratado al jazz en toda la historia del cine. La he traído a colación a este blog en un par de ocasiones. La película es la historia de una amistad, pero también una historia de amor y respeto hacia el mundo del jazz. Está basada en hechos reales, la amistad que entablaron el dibujante Francis Paudras y el pianista Bud Powell en el París de 1.959. En la película el actor Francois Cluzet interpreta el papel de Paudras y uno de mis saxofonistas preferidos encarna el papel de un imaginario tenor Dale Turner, en el que se concentran pasajes de la vida del referido pianista, del tenor Lester Young y del propio Dexter Gordon. La película fue premiada con el Oscar a la mejor banda sonora, que si bien contiene en su mayor parte temas clásicos del jazz, contó con los arreglos y la producción de Herbie Hancock. Asimismo, Dexter Gordon actor novel fue nominado al Oscar como mejor actor. Y es que Dexter se interpreta a él mismo, y resulta de una naturalidad manifiesta. Cuenta Nadine, la viuda de Gordon, en la biografía que escribió del tenor, que Tavernier le contó que cuando se estrenó la película en Estados Unidos Marlon Brando le mando una carta a Dexter en la que le decía que por primera vez había aprendido algo sobre actuación y que el comentario que le hizo el saxofonista fue: “Lady Bertrand, después de eso ¿Quién necesita un Oscar?.
He visto la película un montón de veces, la han visto mis hijos y el día menos pensado se la coloco a mis nietas, al menos a las mayorcitas. Además de por lo ya contado, es de destacar que la música que se oye en la misma, en los escenarios de los clubes de jazz está grabada en directo, que muchos de los actores son los músicos reales y por ahí desfilan, Herbie Hancock, Ron Carter, Pierre Michelot, John McLaughlin, Tony Williams, Freddie Hubbard, Wayne Shorter, Bobby Hutcherson, Cedar Walton…., y también cuenta Tavernier que en el rodaje estuvo presente la improvisación, no podía faltar tratándose de jazz, y que permitió que Dexter metiera “morcillas” en el guión.
Por último, en el Festival de Donosti de 1.987, actuó la banda principal de la película con Dexter Gordon al frente. Fue un concierto memorable. Allí estaba en una de las primeras filas, como ya he dicho en otra ocasión, el arriba firmante. Todavía me emociono al recordarlo, como me emociono en determinados pasajes de la película que, por cierto, si queréis ver o revisitar aconsejo se haga en la versión original.