El concierto de Aranjuez, esa maravilla.
El maestro Rodrigo, ciego desde los tres años, disfrutaba paseando por los jardines de Aranjuez con su mujer, la pianista turca Victoria Kamhi a la que conoció en Paris. El sonido del agua del Tajo, de sus fuentes, de los trinos de los pájaros, el olor de sus flores y plantas inspiraron al maestro saguntino…